jueves, 27 de mayo de 2010

Bueno, vale, va, el final de Lost

(OJO: ESTA ENTRADA NO CONTIENE DEMASIADOS SPOILERS)

A las 5:50 am de la madrugada del pasado lunes sonó el despertador. Era el momento de levantarme, perjurar en arameo contemporáneo, ducharme, recoger a Andrés, montar en el coche, pitar como un poseso al coche que obstruía la salida del garaje y llegar a las 6:30 am a casa de José Miguel para reencontrarme, después de tantas horas, con Emilio, Alfonso, Tania, Irene, Fuen y los dos que ya han sido mencionados y cuyos nombres no repetiré para no crear recelos innecesarios.

Y así vimos el tremendo final de Lost. A mí sí me gustó. Me gustó mucho. Muchísimo. Todo y todos apuntaba y apuntaban a que el fraude iba a ser morrocotudo, después de una sexta temporada más flojucha que las anteriores. Sin embargo, los guionistas me han convencido: Lost ha acabado como tenía que acabar. Hace tiempo asumí que la única forma de disfrutar al máximo de la serie era abandonarse en las triquiñuelas, engaños y cuchufletas de los guionistas. Quizá eso haya ayudado.

Ahora asisto a un panorama generalizado de televidentes que se sienten estafados ante un final al que acusan de demasiado abierto y de no dar respuesta satisfactoria (ni de ningún otro tipo) a los setecientos dieciocho enigmas planteados. Yo prefiero que las cosas hayan quedado así, y no tanto por conformismo o lobotomización como por entender que es la forma más elegante de mantener la magia que ha impregnado la tónica general de la mejor serie de televisión de todos los tiempos, después, claro, de "Los problemas crecen".

7 comentarios:

Dori dijo...

1.- Guau he sido la primera!!!
2.- Cómo me gustaban Los Problemas Crecen.
3.- ¿Ha evolucionado el arameo del clásico al contemporaneo?
4.- No he visto el final de PERDIOS pero ya me he enterado, por todo lo que han dicho así que como no soy fan, no puedo comentar.
5.- Siguiente entrada por favor.

Viti dijo...

No sé qué manía le tiene la gente a los finales abiertos. El cerebro sirve para algo, no sé ¬¬

José Miguel dijo...

¡Gracias!

Eynar Oxartum dijo...

Qué cosa. Yo que no sé casi nada de la serie, y que soy anti-televisión (hace años que me niego a tener una), me llama mucho la atención que la gente quede para ver un capítulo a semejantes horas.

Por cierto, sí, el arameo sigue siendo hablado por medio millón de personas en el mundo. Teniendo en cuenta que tiene unos tres mil años de historia, es natural pensar que de hecho haya evolucionado del clásico (¿bíblico?) al contemporáneo o moderno.

Ángel dijo...

Dori, no habrá siguiente entrada hasta que el número de aciertos de esta no se componga de dos dígitos.

Viti, no les hagas caso y comienza a buscar una cura para el síndrome de abstinencia.

José Miguel, you're welcome.

Eynar, bienvenido, caballero. Yo también soy antitelevisivo, y precisamente por eso empecé a ver esta serie en el ordenador y la única temporada que he seguido en la tele ha sido la sexta por exigencias de guión. Respecto al arameo contemporáneo, es el único idioma que me queda por aprender. Bueno, ese y casi todos los demás.

Alejandra dijo...

Todo tiene solución, señor Ángel. Le puedo pasar unos cassettes no pá poder bailar como en una discoteque, sino para que usted pueda aprender arameo del bueno. Los traje de mi estancia en Maaloula (Siria) cuando pensé en hacerme monja en el convento de Santa Tecla y me oía la santa misa por las noches (en arameo). Para que vea usted lo que me ha cambiado la vida. A saber de aquí a diez años. Cuando quiero le dejo copia de mis misales, libros de coros y cantos y demás lindezas, todo en un perfecto arameo.

Agus Alonso-G. dijo...

Yo jamás me dediqué a darle vueltas a las triquiñuelas de los guionistas (fíjate que hasta ahora no me había enterado que los dichososo números sumaban 108). Y aun así, el final de 'Lost' me ha parecido lamentable (y bien sabes que al hablar del final me refiero como mínimo a toda la última temporada).