viernes, 31 de agosto de 2007

Lorzagirl

Sí, sí, ya sé que os tengo descuidados, que queréis saber más sobre mi cotidianeidad, sobre mi vida, sobre mí, que soy lo que realmente os importa. Pero chicos, la tesis me absorbe (con dos bes, en contra de lo que muchos opinan), y me tengo que pasar todo el día mirando libros con portadas como ésta:

De señores circunspectos, barbudos y laboriosos, que me susurran en sueños que debería ir un poco más rápido si de verdad quiero depositar en Navidad y ser un Doctor hecho y Derecho.

El poquito tiempo libre que me queda lo dedico a leer un poco, a ver capítulos de "Lost" y a intentar sobrevivir hasta el domingo, cuando lleguen mis padres a casa y me vean en plan Sr. Burns en el capítulo del Casino en Springfield, o como a Leo di Caprio en "El aviador", que tanto da porque es lo mismo.

De todas formas, por encima de mi tesis, de mi trabajo, de mi propio bienestar y de mi futuro estáis todos vosotros, así que seguiré salpicando vuestros hemisferios cerebrales con las tontunas de siempre, a ser posible, todos los días.

Aprovecho la ocasión que se me brinda para celebrar el blog day, que es algo así como que el 31 de agosto, por celebrarse la Memoria de San Ramón Nonato, por la vuelta al cole, o no sé exactamente por qué motivo, tengo que escribir en mi blog los nombres y links de otros cinco blogs que me molen mazo, que no tenga hiperenlazados ya y que vayan en otra línea diferente al mío.

Después de casi dos minutos buscando, he encontrado sólo uno, el blog de lorzagirl, una auténtica maravilla a todos los efectos secundarios.

No paro de defraudaros. Lo siento mucho.

lunes, 27 de agosto de 2007

¿Alimentación o alimentaje?

Una vez más, solo en casa, me hago la cena con el siguiente erótico resultado:



- Tres minipizzas de tres quesos cada una (o sea, nueve).
- Un perrito caliente con pan de perrito caliente, ketchup de perrito caliente y mayonesa de perrito caliente.
- Patatas fritas en cuya bolsa aparece un anciano venerable mirando a una de ellas como si de su propia nieta se tratase.
- De beber, Aquarius templado.
- De postre, Chips Ahoy!, claro.

Resulta desalentador comprobar que aún dependo de mis padres para no pesar trescientos kilos.

viernes, 24 de agosto de 2007

Más cucarachas

Cuando hace unos minutos, al salir a la terraza a refrescarme la tez, me he encontrado cara a antenas con una cucaracha grande, roja y de modales exquisitos, he saltado presto y audaz al armario de los productos químicos en busca del Cucal que habría de darle muerte una vez nacida, crecida y reproducida, tal y como la he intuido.

La siguiente imagen ha comparecido ante mis ojos:


En resumen y para no quitaros demasiado tiempo:

- Tres insecticidas que provocan a las cucarachas, en el mejor de los casos, escozor de axila.
- Un limpiamoquetas.
- Tres tipos de quitamanchas diferentes.
- Producto limpiador de hornos.
- Abrillantador para el suelo.
- Suavizante para ropa.
- Norit.

La pena ha sido que después de cinco minutos intentando dar en vano con el Cucal del que carezco, la cucharacha se ha largado por patas. Matarla no la hubiera matado, pero con una buena combinación de todos mis productos, la hubiera dejado bellísima.

Sigo con vosotros

Al final me he quedado en casa, acompañado de una caja de Chips Ahoy! (recordad: las únicas galletas con chips de chocolate de Artiach) y seis botellas de agua mineral. La idea era volver a la playa, pero mi madre me ha dado un parte meteorológico de tormentas, borrascas y vientos fuertes de componente norte-sur, así que me he acomodado en mi sofá, he comprado algo de comida preparada en la tienda de la esquina y la he engullido mientras veía "Broadway Danny Rose", la peli de Woody Allen que compré antes de irme y que no había visto hasta hoy.

Ahora mismo, hago inventario mental:

- Cinco botellas de agua mineral.
- Un paquetito de Chips Ahoy! con signo de admiración.

Además, he concluido que "Scoop" es "Broadway Danny Rose" en color y con Scarlett en lugar de Mia, lo cual me ratifica en la opinión de que la filmografía de Woody Allen es una sola película rodada con un caleidoscopio.

Por cierto, he recibido numerosas cartas solicitando la introducción de más relatos breves, con suicidios, abismos, o ambas cosas a ser posible. Luego os pongo uno que se me ocurrió este verano y que me sirvió para ganar el premio Planeta en el año ochenta y seis.

Para finalizar, voy a compartir con vosotros esta foto, que representa todo cuanto de bueno y puro existe en la raza bovina, y gracias a la cual me dieron el Globo de Oro al mejor guión. La titulé "Perros no, pero no del todo":

Ya casi está

Que sepáis...

... que me reincorporo la semana que viene,
... que traigo regalos para todos,
... que mi blog no va a ser el que era,
... que me saqué el carnet de conducir a la segunda,
... que entre las novedades de mi blog no se encuentra la inclusión de fotos de coches,
... que este trimestre va a ser de aúpa,
... que no me han llamado para el casting del remake de "Qué verde era mi duque",
... que los padres de 4104 han veraneado en Tarifa,
... que he estado dos horas en una terraza envuelto en una manta de color salmón,
... que debéis leer "La rebelión de las masas" porque mola mazo,
... que lo mejor de todo es que mi marido ha dejado de roncar.

Y así sucesivamente.

sábado, 11 de agosto de 2007

Día 11 de agosto, sábado

Unos en París, que no se acaba nunca hasta el día 14 de agosto; otros en Tarifa rodando por la arena; otros en la Cenia, comiendo berberechos. Y yo en La Manga sin esa conexión a internet que me parasita diez meses y medio al año. Pero hoy estoy en casa de mi novia, que me ha obsequiado con treinta minutos de conexión por cinco euros con treinta. No lo veo mal.

Este verano está resultando un tierno verano de lujurias, azoteas, tesis doctoral, películas, mar menor y llamadas telefónicas. En La Manga hay dos mares, uno a la derecha y otro a la izquierda. El de la derecha es el Mediterréneo, pero como tiene olas y no hago pie no me meto más que para humidificarme esporádicamente cuando el de la izquierda está feo. Además, este año me altera terriblemente la inmensa carga sicalíptica de sus costas levantinas, cada vez más carníferas.

Por eso me gusta más el mar de la izquierda. Porque no tiene olas, se hace pie y el agua está caliente. Todo son ventajas. Ni una medusa, ni un pez espada, ni un chiringuito. Una balsa de agua que sólo contiene salinización exagerada y ancianos venerables. En el mar menor puede hallarse todo tipo de ancianos venerables: hombres y mujeres; ricos y pobres; arrugados o tersos; naturales o mechados. Estén como estén, su compañía es siempre gratificante, y además siempre dicen "buenos días", que es algo que me gusta muchísimo oír. A veces se crean situaciones de aparente tensión y compiten en venerabilidad, para ganarse luego mis arrumacos y parabienes, pero pasa pocas veces y acabamos siempre riéndonos con matojos de algas sobre la cabeza, a la antigua usanza.

Parece ser que este fin de semana no habrá mar menor ni ancianos venerables. Internet sustituirá al mar menor, el Mediterráneo a las algas y el pádel a los ancianos venerables. De vez en cuando apetece reconectarse al mundo real, en el que, para mi desgracia, no hay tantos ancianos, y los que hay no llevan gorros ni gafas de sol con cristales naranja.

En la habitación contigua, una novia que no se aclara con su álbum virtual de fotos. Ahora, en cuanto acabe esta entrada y tenga ganas de bañarme, iré a ayudarla mediante el clic del roedor sobre el aspa roja de arriba a la derecha, y pondré así fin fin a tanto sufrimiento inútil.

Por cierto, acabo de repasar vuestros blogs. Incluso he deyectado sutilezas en alguno de ellos. Para que luego digáis. Comunistas, que eso es lo que sois todos. Un hatajo de comunistas.