jueves, 10 de septiembre de 2009

Mucamas

Anteayer, la señora de la limpieza nos comunicó su marcha inevitable. En unos días nos dejará una de las dos únicas que no ha destruido de manera demasiado ostensible mi hogar. Sí, es cierto, en algunas ocasiones confundía la ropa incolora con la colorida, pero a quién no le gusta cambiar aleatoriamente las tonalidades de sus vestimentas y salir vestido de mamarracho multicolor de vez en cuando. Por lo demás, fetén.

Sobre todo, claro, si comparamos con las antecesoras. Recuerdo con especial cariño a una. Como la mantendré en el anonimato, no faltaré a la caridad ni a los principios del empirismo básico. Su perímetro torácico y abdominal era superior al del diámetro de cualquier luna de Júpiter escogida al azar, y su concepto de higiene consistía en perfumarse las axilas con esencia de cadáver. Tampoco era especialmente delicada en el trato. Ni con los seres vivos ni con los inertes.

La mañana siguiente a la contratación llegó, trabajó, se marchó y ,al rato, llamó para despedirse. En menos de dos horas había roto tres vasos antiguos, fregado el suelo con lija del siete (a lo mejor no exactamente, pero con similar resultado), y conseguido desprenderle la corona plateada a la talla de la Inmaculada que preside nuestro salón. Para no faltar a la verdad, diré que trató de enmendar su error e intentó recomponer la figura a base de encajarle la corona con una fresadora industrial, si juzgamos por los resultados.

Ahora todos cruzamos los dedos. La cesante ha dejado el listón alto. Casi nos conformaríamos con que la próxima no alcance a cargárselo.

14 comentarios:

Alejandra dijo...

Eso le pasa a usted por poder permitirse una mucama. Todos los rotos y descosidos de mi casa son míos. Y eso no me gusta porque no me puedo despedir a mí misma. A veces, me gustaría.

Simucama dijo...

Esto escandalizaría a mi propia madre, que es mucama mía y de mucha más gente, profesional inigualable como es de la limpieza.
Definitivamente la lavadora ha de ponerla uno mismo, para así elegir el color del que vas a impregnar toda la ropa blanca. Nada como una camiseta roja de los "jipis" para dejarte unos calzoncillos rosados o una camisa gris que se torna morada.

Nils dijo...

recuerdo una asistenta en Pamplona que me destiñó una camiseta coral en naranja y un vaquero crudo en color MELoCOTÓN!! que a los meses estaba casi rosa... menuda mierda!

M.L.R.O. dijo...

Las hijas de mucamas,sirvintas en castellano,cuyo perímetro torácico y abdominal es superior al del diámetro de cualquier luna de Júpiter escogida al azar,debemoz aplaudir o debemos esperar a que te ordenen que te metas el Nihil obstat quominus imprimatur por el orto?

Ángel dijo...

Alejandra, sería despido nulo y tendría que forzar la readmisión. No compensa.

Simucama, creo que, si yo pusiera una lavadora, lo de menos sería que hubiera colores mezclados. Sería bastante más probable que introdujera algún mueble por error.

Nils, pues a priori no parecen colores demasiado incompatibles.

M.L.R.O., si no es usted familia cercana de la persona de la que hablo, no entiendo su reacción. Disculpe.

Inverosímil dijo...

Pues la mía es un sol pero un poco especial:
http://meesinverosimil.blogspot.com/2009/05/manias-e-interpretaciones.html

ace76 dijo...

Si es que está muy difícil encontrar buen servicio hoy en día... :-D

Paul Spleen dijo...

Ángel, repite conmigo:

Nunca más sacaré a relucir a un miembro de un gremio en mis entradas, pues seré atacado vilmente por el resto de agremiados y sus allegados.

M.L.R.O., repite conmigo:

Hoy voy a aprender dos palabras que me harán mucho bien: ironía y lexatín.

Paul Spleen dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ángel dijo...

Inverosímil, perdón por la redundancia, pero es casi casi inverosímil.

Ace, el servicio de mi casa está impecable. Siempre.

Paul, ya lo hice con los informáticos y no me dio tan mal resultado. Se ve que no eran suficientemente orondos.

maría dijo...

¡Ángel! Te vamos a regalar una bayeta y un mocho y ya verás lo difícil que es ser mucama, porque como decía mi abuela: "el que no limpia no rompe".

Y seguro que a la Inmaculada le sobraba la corona.

TortugaBoba dijo...

Me ha dado la risa. Me encantan las camisetas mamarrachas, así me va. Muak.

Anónimo dijo...

animo con la búsqueda y...muchas felicidades, don Angel y que lo pase usted bien hoy!

Fdo Visitante PseudoHabitual

Irrer Hutmacher dijo...

Jajajajajajaja mi madre es limpiadora pero te aseguro que no ha roto en los años que lleva en ello nada en ninguna casa, pero tambien a veces ha llamado a la casa el mismo dia de empezar para decir que no volvía pero era de la de mierrrrrrda que podía llegar a haber por todos lados, y yo siempre la he animado a dejar pocilgas de ese calibre, porque una cosa es hacer de chacha y la otra recoger mierda acumulada de semanas y meses, que la gente es muy cerda.