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En pocos minutos tendrá lugar el enlace entre Rocío y Emilio, conocido como Emilcar en la blogosfera, gurú de Apple y director de mi coro. No faltará música en la ceremonia, ni en la comida, ni en la barra libre, ni en la unidad de comas etílicos del hospital. Ni siquiera faltará retransmisión en directo para todos aquellos que quieran seguir tan magno acontecimiento desde mi twitter.
Esta tarde-noche llegaré exhausto a mi casa y dejaré para mañana la maleta que tendré que hacerme para asistir presto al LIBER de Barcelona, donde estaré hasta el sábado que viene. No temáis, por tanto, hijos míos, si no os escribo esta semana. Lo más probable es que no haya muerto; estaré vivo, sonriente y flanderizado en un estand a varios kilómetros de mi ciudad natal.
Menos mal que de pequeño veía Bola de Drac. Gracias a Son Goku y sus allegados mi catalán es casi impecable.
6 comentarios:
Jo, qué vida más agitada a la par que entretenida. Bodas, países exóticos... Pensaré en ti con envidia mientras esté en Canarias tomando el sol (o no).
Perdona querido Ángel, si no me equivoco Bola de Drac lo veías en canal nou, es decir en Valenciano...no mezclemos el Catalán con el Valenciano, aunque sean el mismo dialecto...no!! Que te lo pases bien..
superflicka, si me haces un hueco tomaría el sol contigo...mmmm Canariassss
Superflicka, en Canarias, pf... con la de ciclones y anticiclones que hay por ahí.
Mluisa, lo veía también en TV3, pero de todas formas sabes que el valenciano y el catalán son exactamente lo mismo pero con distintas palabras. Y no me hagas hablar de la razón por la que te gustaría ir a Canarias...
Buen viaje y que disfrutes mucho de Barcelona. Tráeme una hoja de algún árbol que te encuentres, anda. Para compensarte, hoy me he vestido de negro de los pies a la cabeza, como buena ema que soy, según tu dudosa opinión. Abrazos de color negro azabache.
Yo, como ya estoy en Canarias, pienso zamparme unas papas con mojo de cilantro a la salud de Rocío y Emilio, faltaría más.
Y, por el mismo precio, me entero de dos cosas, a saber: a) no conozco a nadie de su coro; y b) es usted tenor, y es usted literal. Así da gusto, hombre, enhorabuena a todos. Y a mí también, por qué no.
Ana, si no fuera porque me tengo que ir dentro de cinco minutos, enumeraría todas las razones por las que creo que deberías taparte un ojo con el flequillo.
Paul, sí, soy un tenor literal. Pero jamás comería papas con mojo picón y pelo humano, como me intentaron servir un día en un bar próximo a mi casa. Lo digo por si acaso.
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