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Últimamente, los sábados, lejos de constituir día de asueto o, en el peor de los casos, de compra semanal y limpieza periódica, se están convirtiendo en jornadas de concentración intensiva de hobbies. Esto provoca en mi débil organismo una aglomeración de sensaciones contradictorias de cansancio y placer que pronto acabará conmigo irremisiblemente.
El sábado pasado, por citar un caso, todo empezó con un torneo de esgrima a las 8.30h, que acabó a mediodía y en el que desempeñé con donaire mi glorioso papel de perdedor invicto. Justo después de la ducha rápida, pasé a la macrocomida de despedida y homenaje a Juan, un gran bajo de Ars Mvsica que se marcha a Texas para investigar sustancias químicas y no vuelve hasta dentro de dos años. Acto seguido, con los pulmones aún encharcados de patatas a lo pobre y cordero a la brasa y tarta de la abuela, ensayo intensivo de la Missa à 4 de Byrd, prolongado hasta las nueve y media, momento de ver Eurovisión por entre los huecos que dejan las pestañas cuando se tienen los párpados semicerrados, síntoma inequívoco de congestión cerebral.
El sábado que viene me esperan dos conciertos por la mañana, a las 11h y a las 12.30h, con subsiguiente aperitivo y cerveceo postconcertum. Con lo que me quede de funciones vitales intentaré afrontar otro concierto vespertino, esta vez como público, y un visionado in extremis de "Star Trek" en alguno de los mejores cines de Murcia.
Y lo peor de todo es que, aunque parezca una queja, estoy absolutamente encantado.
Últimamente, los sábados, lejos de constituir día de asueto o, en el peor de los casos, de compra semanal y limpieza periódica, se están convirtiendo en jornadas de concentración intensiva de hobbies. Esto provoca en mi débil organismo una aglomeración de sensaciones contradictorias de cansancio y placer que pronto acabará conmigo irremisiblemente.
El sábado pasado, por citar un caso, todo empezó con un torneo de esgrima a las 8.30h, que acabó a mediodía y en el que desempeñé con donaire mi glorioso papel de perdedor invicto. Justo después de la ducha rápida, pasé a la macrocomida de despedida y homenaje a Juan, un gran bajo de Ars Mvsica que se marcha a Texas para investigar sustancias químicas y no vuelve hasta dentro de dos años. Acto seguido, con los pulmones aún encharcados de patatas a lo pobre y cordero a la brasa y tarta de la abuela, ensayo intensivo de la Missa à 4 de Byrd, prolongado hasta las nueve y media, momento de ver Eurovisión por entre los huecos que dejan las pestañas cuando se tienen los párpados semicerrados, síntoma inequívoco de congestión cerebral.
El sábado que viene me esperan dos conciertos por la mañana, a las 11h y a las 12.30h, con subsiguiente aperitivo y cerveceo postconcertum. Con lo que me quede de funciones vitales intentaré afrontar otro concierto vespertino, esta vez como público, y un visionado in extremis de "Star Trek" en alguno de los mejores cines de Murcia.
Y lo peor de todo es que, aunque parezca una queja, estoy absolutamente encantado.
14 comentarios:
Como bien predijiste aquí estoy. Es interesante como haces spam de tu coro jejeje...
Supongo que a todos nos ocurre algo parecido. Cuando llega el viernes planeas un fin de semana de trabajo y descanso por igual para tener más tiempo libre durante la semana. Después te das cuenta de que nada te va a salir como esperabas y sin embargo no haces nada para cambiarlo. En fin, así son las cosas y así no se las hemos contado.
Un saludo!
No has entendido nada, falso Uge. Lo que tienes que hacer ahora es volver a leer todo el post y dejarte el pelo largo.
Si yo hiciera todo eso un sábado, no llegaría viva al lunes. Admiro su capacidad de fin de semana. No sé si los mosquitos de la entrada anterior tienen algo que ver. Me temo que sí.
que aburrimiento :-(
Alejandra, es probable. Desde que me pican estoy cobrando unas fuerzas inusitadas.
Vaciando, tú es que te aburres enseguida.
¿Aficionado a la esgrima? Con tanta afición no es raro que tengas un poco abandonado el blog de cine...
El blog sí, por ahora la afición sigue intacta. Se retomará. Todo a su tiempo.
Es que eres un hombre de mundo y cosmopolita, es lógico que tus sábados sean así, no te preocupes, es normal.
Pues sí que te ha hecho efecto la transfusión de medio litro de mi sangre, sí...
Ace, últimamente mis posts se están hibridando. Eres una influencia nefasta.
María, y aún me quedó un poco para regar los geranios.
Coño (con perdón), como para no estar encantado. Nunca me había llamado la atención el esgrima, y te repito y tripito que desde que te leo me interesa cada vez más el tema.
Oye, ¿no engordas como una ballena con tanta comilona :):)?
Besoooooooooo
Pues por ahora no engordo como una ballena, pero dame un poco de tiempo (y de comida). Por cierto, es "la" esgrima. Un deporte femenino, lo que son las cosas.
Protesto, deberia decirse:
"La esgrima y el esgrimo"
¿En qué país piensas que vives?
Fíjate que pensé lo del género Ángel, pero me decanté por el masculino. Una vez más: hay que ver lo que voy aprendiendo en tu blog sobre el tema :)
Muaks.
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